Barcelona y Santander están a la cabeza del ranking de ciudades inteligentes
Ya son diez las poblaciones españolas que han apostado por evolucionar hacia la tecnología de las ciudades inteligentes, según IDC. Barcelona, Santander y Madrid lideran la clasificación.
El interés por las ciudades inteligentes sigue creciendo en todo el mundo, y de manera muy especial en España. Así queda reflejado en el estudio “Smart Cities 2012 - El viaje hacia la ciudad inteligente” que IDC España ha elaborado con el patrocinio de Atos, BBVA, Ferrovial Servicios, Microsoft y Urbiotica, en el que, además de actualizar el análisis de las 44 ciudades participantes, se ahonda en los retos, oportunidades y modelos de gestión para seguir avanzando en este viaje hacia la inteligencia.
Del informe se desprende que Barcelona, Santander, Madrid, Málaga y Bilbao encabezan el ranking 2012 de ciudades inteligentes españolas por contar con proyectos “inteligentes” dispersos ya en funcionamiento, como sistemas de gestión del tráfico, de e-Administración, etc., a las que se suman Valladolid, Zaragoza, Vitoria-Gasteiz, Donostia-San Sebastián y Pamplona/Iruña como serias aspirantes, debido a que han llevado a cabo acciones concretas en su viaje hacia la inteligencia.
En el caso concreto de Pamplona, su alcalde, Enrique Maya, explica que “hay que pensar en los ciudadanos y la tecnología debe estar siempre a su servicio, para que el ciudadano vea la utilidad de las medidas adoptadas. Esa es la clave del éxito”. A este respecto, Maya destaca que actualmente 150 trámites administrativos de su consistorio se realizan por vía electrónica. “Trabajaremos por las ciudades, para que sean más inteligentes, porque ese es el camino”, apunta el alcalde.
El estudio de IDC fija asimismo las claves del viaje hacia la ciudad inteligente, destacando la colaboración de entidades públicas y privadas, contar con una estrategia financiera propia, la involucración de empleados públicos y ciudadanos, el desarrollo de procesos internos eficientes y la promoción de la innovación. Todas estas claves se resumen en un punto básico, que es crear un ecosistema colaborativo en el que todos trabajen juntos. "Sin embargo, tan sólo el 15,9 por ciento de las ciudades analizadas colabora con entidades privadas”, asegura Rafael Achaerandio, director de análisis de IDC España.
Achaerandio añade que “convertirse en una ciudad inteligente conlleva visión, voluntad política, colaboración con accionistas, recursos financieros apropiados e inteligencia colectiva, además de una gestión de los proyectos y programas sólida y, por supuesto, un gobierno competente”.
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