Gigabit WiMax se perfila como nueva candidata a 4G
El IEEE ha empezado a trabajar en una versión de 1 Gbps de WiMax que podría desplazar a las tecnologías celulares y a las versiones previas de WiMax distinguiéndose como candidata favorita a convertirse en la base de las comunicaciones móviles de próxima generación (4G).
El estándar que definirá el funcionamiento de WiMax a 1 Gbps, IEEE 802.16m, estará listo en 2009, y utilizará las actuales tecnologías OFDM y MIMO, con las cuales diversas compañías, incluida NTT DoCoMo ya han realizado demostraciones a velocidades Gigabit sin hilos. Además, el estándar será compatible con la actual especificación de WiMax móvil (802.16e), y también soportará enlaces fijos y celulares.
No obstante, aún quedan algunas cuestiones tecnológicas por resolver en la especificación. Una de ellas es el empaquetado de las múltiples antenas que la tecnología requiere –en su demostración NTT DoCoMo utilizó cuatro- dentro de un dispositivo móvil. En este sentido, IEEE está trabajando para minimizar múltiples antenas en PCBs que puedan incorporarse dentro de los dispositivos portátiles.
Desajustes políticos en dos mundos que confluyen
En cualquier caso, probablemente el principal problema para que WiMax se convierta de hecho en base de la 4G, sea más de índole política que tecnológica. Una convergencia de WiMax y 3G para dar lugar a la “4G” encarnaría en sí misma la del networking y las telecomunicaciones y, por tanto, entrarían en juego los organismos de estandarización que tradicionalmente se han encargado de regular técnicamente cada uno de estos mundos por separado.
Ello supondría que un estándar de IEEE (Institute of Electrical and Electronics Engineers)– generalmente más enfocado en las tecnologías de datos y networking, como Ethernet- fuera aceptado como la próxima generación de las redes celulares, un ámbito típico de las telecomunicaciones. Pero la normalización de las tecnologías de telecomunicaciones siempre ha sido dominio de la UIT y del grupo 3GPP (3rd Generation Partnership), una iniciativa liderada por operadores y de la que son miembros las organizaciones ARIB, CCSA, ETSI, ATIS, TTA y TTC. Aunque existen algunos operadores que han abrazado WiMax, gran parte se han mostrado hostiles hacia la nueva alternativa de comunicaciones inalámbricas de banda ancha, cuyos principales impulsores son empresas del mundo TI, como Intel.
