Microsoft apela la última sanción de la UE

Microsoft ha presentado una apelación contra la última multa de 280,5 millones de euros que la Comisión Europea le puso en julio por no cumplir las exigencias recogidas en su fallo antimonopolio de 2004.

La Corte de Primera Instancia de Luxemburgo está a considerando la apelación de Microsoft contra la sentencia que en 2004 obligaba al fabricante a comercializar en Europa una versión de Windows sin el software Media Player, así como a facilitar información sobre sus protocolos de servidor a la competencia y a pagar una multa de casi 500 millones de dólares. Se espera que la corte emita su decisión sobre esta apelación entre finales de este año y principios del próximo. En cuanto al fallo sobre la alegación ahora presentada podría tardar años.

Microsoft alega desde un principio su intención de cumplir con el fallo antitrust de 2004, el pronto pago de la sanción y el lanzamiento de una segunda versión de Windows XP sin Windows Media Player; una versión, por otra parte, cuyas ventas han resultado prácticamente nulas, según la compañía.

Pero la Comisión no acusa de incumplimiento en estos puntos. Sus preocupaciones se centran en la tercera medida impuesta al fabricante; es decir, en la exigencia de que facilitara a sus competidores en el mercado de servidores la información técnica necesaria para que éstos pudieran desarrollar productos compatibles con las plataformas de Microsoft.

El pasado julio, la paciencia de la Comisión pareció haber superado su límite, y anunció una multa por valor de 280,5 millones de dólares. Esta cantidad fue calculada aplicando una multa diaria de 1,5millones de euros desde el 16 de diciembre del año pasado –fecha tope dada a Microsoft para presentar la información solicitada- y el 20 de junio de este año, momento en que, según la Comisión, Microsoft empezó a mostrar una mayor disposición a cumplir con la medida.

Neelie Kroes, comisaria europea de Competencia, considera que la compañía ahora está esforzándose realmente por cumplir en este punto. “Es una vergüenza que no lo hiciera hace dos años”, cuando se le exigió.

Por otra parte, mientras todo esto sigue adelante, los responsables europeos antimonopolio han estado ocupados analizando Windows Vista, la próxima versión del sistema operativo de Microsoft. Este análisis parte dela sospecha de que algunas de las nuevas funcionalidades de Vista podrían también contravenir algunas de las leyes antimonopolio que sirvieron de fundamento para sentencia de 2004. Microsoft ha advertido que el lanzamiento de Vista podría verse retrasado en Europa como consecuencia de los problemas con los reguladores europeos.


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