Red Hat integra el hipervisor de virtualización en el kernel de su Linux

De manos de Tim Burke, vicepresidente del equipo de ingenieros de Red Hat, hemos tenido la oportunidad de conocer las principales novedades de la versión Red Hat Enterprise Linux (RHEL 6). Para empezar, nos ha destacado que está basada en el Kernel 2.6.32, con la presencia de más de 3.900 nuevas características frente a la edición anterior. El hecho de descender al nivel más bajo del Kernel también ha hecho posible que se optimicen aspectos determinantes en entornos profesionales, como es el mayor rendimiento, y el menor consumo de potencia. En una configuración típica que monte varios núcleos de procesadores Intel Nehalem-EP, es posible conseguir de media hasta un 20 por ciento de ahorro de energía. La función de Kernel tickless mantiene durante más tiempo a los sistemas en estado inactivo, lo que permite un ahorro de energía extra.

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Por su parte, la seguridad ahora va integrada en el diseño del sistema operativo, de modo que todo control de acceso queda supeditado a las políticas desplegadas mediante SELinux, con aislamiento de procesos para que los puestos de los usuarios puedan ejecutar aplicaciones de dudosa procedencia de forma segura y protegida.

A nivel de virtualización, el hipervisor KVM ahora está totalmente integrado en el kernel, por lo que todas las mejoras del sistema se benefician de cualquier entorno virtualizado. No obstante, el entorno de aplicación se mantiene uniforme tanto en los sistemas físicos como virtuales.

Por último, Burke nos ha destacado el hecho de que la flexibilidad de implantación es máxima, gracias a la posibilidad de mover los huéspedes entre los distintos equipos host. De hecho, los administradores pueden consolidar los recursos en menos máquinas durante los períodos de poca actividad, o bien, liberar hardware durante el tiempo de parada por mantenimiento. En este sentido y de cara a facilitar las labores de los administradores, la herramienta Policykit aporta el acceso a los usuarios a las operaciones privilegiadas, como añadir una impresora o reiniciar un sistema de escritorio, sin que sea necesaria la presencia o el otorgamiento de privilegios por parte del administrador.

Santiago Madruga, responsable de desarrollo de la compañía para España y Portugal nos ha comentado finalmente que en ningún caso el lanzamiento de la nueva versión obliga a sus clientes a llevar a cabo una actualización inminente. Su política es ofrecer soporte a los productos a lo largo de 10 años desde que se produce su lanzamiento, con las correspondientes actualizaciones. No obstante, RHEL 6 cuenta con OpenChange para obtener acceso a los servidores de Microsoft Exchange mediante protocolos nativos, con el fin de que clientes de correo como Evolution puedan integrarse con servidores Exchange.

En próximos números de nuestra revista tenemos pensado ofrecer un amplio análisis sobre las novedades de la nueva versión RHRL 6.