Internet de las Cosas
Smart Cities

Las smart cities y la "vida conectada" crecen en popularidad

Las ciudades inteligentes son sinónimo de ciudades sostenibles, más eficientes, más ecológicas, más solidarias, más concienciadas en el uso compartido de los recursos.

Joven con smartphone

Antes de 2050 se crearán en el mundo más de 9400 ciudades y el 70% de la población vivirá en ellas, según studio Behind smart cities Worldwide, realizado por la Universidad Autónoma de Madrid. El crecimiento de las urbes y los problemas que conllevan podrían simplificarse gracias a las conectividad, siendo clave para que se adopten nuevos modelos de ciudad más eficientes en todos los niveles, según Vector ITC Group.

 

“Uno de los principales retos de una smartcity es conseguir la eficiencia en el uso de todos sus recursos disponibles y que este control de los recursos sea posible desde cualquier dispositivo inteligente. Para lograr que una ciudad disponga de una movilidad tecnológica a todos los niveles, además de contar con las infraestructuras tecnológicas necesarias, los ciudadanos deberán tener acceso a dispositivos inteligentes con los que interactuar y contribuir al uso eficiente de los recursos” sostiene Javier de las Heras, Responsable del Área de Tecnología de Vector ITC Group.

 

En una smartcity es fundamental poder llevar a cabo cualquier tarea cotidiana o gestión administrativa desde un dispositivo inteligente. La Administración 2.0 es otra pieza clave en toda smartcity. Hay que desarrollar soluciones que faciliten y refuercen las relaciones entre la Administración Pública y el ciudadano, construyendo así aplicaciones tecnológicas que agilicen el trabajo de los empleados públicos y que aumenten a su vez la participación ciudadana (pagar el parking, consulta de multas, declaración de la renta, etc.) . Todo esto conecta con un crecimiento más sostenible y tecnológico.

 

Las redes sociales también cumplen una función importante. Con la integración de las tecnologías en los planes socioeconómicos, políticos y los relacionados con el medioambiente, se impulsa la colaboración entre las ciudades y las administraciones. Por ello, utilizar las redes sociales para fomentar la participación pública, supone abrir la gestión a la participación del ciudadano, potenciado éste por las tecnologías de la información y las telecomunicaciones y generando con ello otro tipo de oportunidades, tales como culturales y empresariales, que están incrementando el interés en el mismo por parte de los gobiernos y las administraciones públicas.

 

Cada vez son más las ciudades y municipios que necesitan monitorizar un gran número de variables para optimizar los recursos y dar un buen servicio a la ciudadanía. La tecnología se ha convertido en una herramienta fundamental para medir estas variables. Y es que, gracias a ella es posible predecir y controlar el consumo de energía de industrias, oficinas, hogares, administraciones y de todos los agentes que forman parte de una smartcity.

 

Por ejemplo hay herramientas que mediante una red sensorización obtienen la información necesaria para realizar simulaciones que calculan el consumo óptimo en cada momento en un proceso industrial. Con esta información se conoce la situación actual y mediante unos patrones predictivos se conoce la previsión de demanda en el futuro, lo que permite adecuar el consumo y ahorrar energía.

 

Este modelo podría ser escalable a otras áreas fuera de la industria, permitiendo mejoras en términos de consumos y costes, lo cual aumentaría la eficiencia energética de las diferentes instalaciones donde se implantase.



TE PUEDE INTERESAR...

CASOS DE ÉXITO

Accede a nuestra publicación de canal

DealerWorld Digital

Documentos ComputerWorld

Documento Pure Storage y Kyndryl INFRAESTRUCTURAS