Actualidad
Comunica.Móviles
Aplicaciones
Movilidad

¿Cuánto es demasiado para gastar en una app móvil?

Una investigación, hecha por Flurry, sobre los hábitos de compra de aplicaciones móviles desvela lo que tiene sentido pagar por una aplicación móvil, y lo que no.

smartphone apps

La mayoría de los usuarios de dispositivos portátiles, no quiere pagar nada por las aplicaciones. ¿Pero está dispuesto a pagar por no tener anuncios? ¿O desbloquear características o contenido adicional? Y si es así, ¿cuánto está dispuesto a pagar?

 

En julio de 2013, Flurry (según cita el blog) un suministrador de servicios analíticos de aplicaciones, presentó los resultados de su investigación de precios de apps móviles. En esencia: la abrumadora mayoría de los consumidores prefieren aplicaciones gratuitas, aunque lleven anuncios.


En 2013, el 90 por ciento de todas las apps de iOS eran gratuitas, según Flurry. Los usuarios de Android son todavía menos proclives a pagar por las apps, según Flurry. Entre todos los usuarios de apps, los dueños de iPad tienden a ser los “mayores gastadores” yl precio medio de las apps para iPad en abril de 2013 era de más de 2,5 veces mayor que el coste de las apps para iPhone y más de 8 veces más caro que las apps de Android, según Flurry.

 

En resumen: la mayor parte de la gente no gasta dinero en apps. “Los desarrolladores de algunas apps especializadas pueden monetizar con descargas de pago, y las apps de juegos algunas veces pueden generar ingresos significativos a través de compras ‘dentro de la aplicación’” según Flurry. Y como “los consumidores no quieren pagar por la gran mayoría de las aplicaciones y la mayor parte de los desarrolladores necesitan generar ingresos, parece claor que los anuncios en las aplicaciones van a continuar siendo algo seguro en el futuro previsible”.


Los anuncios son inevitables en nuestra cultura. Es el precio que tenemos que pagar. Los anuncios son correctos para cierto tipos de aplicaciones, especialmente para esos en los que no pasamos mucho tiempo utilizándolos.


La aplicación de The Weather Channel es un ejemplo. La versión gratuita para Android e iOS incluye pequeños anuncios que corren en el fondo de la app. Hay también una aplicación separada, gratuita, de Weather Channel para iPad. Pero los anuncios en estas aplicaciones no son molestos, y raramente pasamos más de un par de minutos en la aplicación, mirando el tiempo local.


Alternativamente podemos pagar 4 dólares en The Weather Channel Max, una aplicación sólo iOS que elimina los anuncios y ofrece algunas prestaciones adicionales. Gastar esos 4 dólares no merece la pena, especialmente cuando hay tantas aplicaciones fantásticas y gratuitas sobre el tiempo, y sin anuncios.

 

Pero podemos ver otras aplicaciones de contenido especializado, como la aplicación de Ken Burns para iPad. La aplicación está muy bien realizada y ofrece toneladas de clips de documentales de Burns sobre historia americana. También es gratuita… hasta cierto punto. Para ver algunos de los reportajes habrá que pagar 10 dólares. ¿Es mucho? Para algunos indudablemente sí. Pero si tenemos en cuenta que hace unos años pagábamos de 20 a 100 dólares por CD-ROMs con contenidos similares, entonces vemos que no es mucho.

 

Comparativamente, entonces, 10 dólares o euros por una aplicación puede ser un muy buen valor, especialmente si eres un especialista de historia americana, y por otro lado tener que sufrir anuncios viendo esos reportajes sería realmente molesto.


También pagar 10 euros por una herramienta de productividad puede tener mucho sentido si te permite ser productivo en lugares donde antes no lo eras.


Las aplicaciones gratuitas tienen siempre un precio, ya sea la exposición a anuncios, prestaciones limitadas, o, lo que es peor, riesgos para la privacidad. Al final, el valor de una aplicación está en lo que te permite hacer o lo que enriquece tu vida o conocimiento. Y entonces pagar 10 dólares o 10 euros puede ser una buena inversión.



TE PUEDE INTERESAR...

CASOS DE ÉXITO

Accede a nuestra publicación de canal

DealerWorld Digital

Documentos ComputerWorld

Documento Pure Storage y Kyndryl INFRAESTRUCTURAS