PayPal: 25 años al frente de la innovación en el sector de los pagos digitales

Si hay una compañía que puede presumir de ser 100% nativa digital esa es PayPal, una plataforma que permite a empresas y consumidores enviar y recibir pagos a través de Internet de forma segura, cómoda y rentable. Desde su nacimiento en el año 1998, en Silicon Valley, la marca no ha parado de evolucionar y crecer al ritmo que lo ha hecho la tecnología en estos 25 años. De hecho, en la actualidad, la envergadura de su red y la acogida cada vez mayor de su producto la ha convertido en uno de los principales sistemas de pago digital.

En un principio, la compañía surgió de dos empresas diferentes: x.com y Confinity. “Comenzamos como una empresa de criptografía, desarrollando pagos P2P y utilizando la tecnología Beam de las Palm Pilots. Con el tiempo, nos convertimos en una solución de pagos basada en el correo electrónico; toda una revolución en ese momento. Solo con tener una dirección de correo electrónico se podía recibir dinero”, explica Sri Shivananda, vicepresidente ejecutivo y director de tecnología de PayPal. Al poco tiempo, la marca se convirtió en un proveedor de servicios externo no oficial que los usuarios de eBay incluían como método de pago en las descripciones de los artículos, por lo que “eBay vio la oportunidad de acogernos en su seno y, finalmente, fuimos adquiridos, pasando a ser su servicio oficial de pagos. Crecimos de la mano de eBay y lo hemos seguido haciendo tras separarnos en 2015”.

Innovación, la piedra angular

Desde sus inicios, la innovación y la tecnología han sido las piezas claves del éxito de la marca que, según Shivananda, se ha desarrollado en cuatro iteracciones: “La fase de inicio, donde utilizamos las tecnologías a nuestro alcance para poner en funcionamiento el servicio, probando diferentes hipótesis, explorando diferentes ejes, unificando empresas, etc”. En segundo lugar, en la fase de crecimiento, “tomamos como punto de partida un código en C++, siendo esta una arquitectura mucho más detallada que nos permitió trabajar con un volumen mucho mayor, y que duró aproximadamente una década”. La tercera fase, la de ampliación, supuso “nuestra fase de arquitectura horizontal, en la que desmontamos monolitos, particionando los datos, los microservicios y la arquitectura basada en eventos, utilizando tecnologías de código abierto”. Y, por último, “nos posicionamos en una mentalidad de plataforma, donde converge tecnología pesada indiferenciada, utilizando la filosofía de la nube, integrando nuestras adquisiciones, unificando activos de datos y utilizando ciencia de la información e IA”.

Una estrategia, cinco claves

Desde el punto de vista tecnológico, el motor estratégico de la marca se divide en cinco áreas de inversión significativas. La seguridad es, según Sri Shivananda, “nuestra principal prioridad tecnológica”, ya que resulta esencial para ofrecer una plataforma de confianza a los clientes en un mundo donde las brechas de seguridad están a la orden del día. “Cuando hablamos de seguridad, lo que ayer era suficiente, hoy ya no lo es. PayPal, al igual que otras muchas grandes empresas, sufre ataques a cada segundo, y solo podemos gestionar este volumen de amenazas mediante una arquitectura con capas de seguridad reforzada y con una tecnología sólida como es la IA”.

"La seguridad es nuestra principal prioridad tecnológica"

La estabilidad es otro de los objetivos a seguir por parte de la marca. Para los 35 millones de comerciantes que confían en PayPal como medio de pago en sus negocios es de suma importancia que el servicio sea de alta calidad, confiable y que esté siempre disponible. “El año pasado procesamos un volumen de pagos de 1.300 millones de dólares, y sigue creciendo. Es nuestra responsabilidad asegurar que cada transacción válida se completa y llega al comerciante”, explica el director de tecnología de PayPal.

Otra de las piezas fundamentales es la velocidad, es decir, la capacidad de innovar a un ritmo superior al de la industria y que pueda mantenerse. Para ello, según Shivananda, “invertimos mucho en nuestras plataformas, herramientas y procesos de ciclo de vida de desarrollo de productos, de tal forma que mejoremos el flujo, reduzcamos el esfuerzo y eliminemos las barreras que aparezcan durante la ejecución. Esto nos permite una mayor productividad y creatividad por parte de los desarrolladores”.

De 2016 a 2022, la compañía pasó de procesar un volumen de pagos de 354 mil millones de dólares a 1,36 billones el año pasado. Este crecimiento, de acuerdo con Shivananda, “necesita estar respaldado por una arquitectura tecnológica que pueda crecer aumentando la capacidad y sin que sea necesario un trabajo pesado de ingeniería, reconstrucción o re-arquitecturas”, por lo que la escalabilidad es otro de los ejes clave. Por último, pero no por ello la menos importante, se encuentra la bonificación o, en otras palabras, la eficiencia. “A la vez que trabajamos en estas áreas mencionadas, debemos vigilar atentamente la eficiencia y el gasto, para garantizar que nuestro coste por transacción sea el más bajo y que mantenemos la excelencia operativa en todas las áreas tecnológicas”.

Para hacer frente a todos estos retos, PayPal cuenta con un equipo humano altamente cualificado, aunque en España, la plantilla es relativamente pequeña, con funciones como ventas y marketing. “Nuestra plantilla tecnológica opera a escala global y en todas las regiones, por lo que aprendemos diferentes lecciones de cada una, que aplicamos en el resto de los mercados donde operamos. Esto también nos permite contar con lo mejor en términos de tecnología a escala mundial, de mitigación y prevención del fraude y de medidas de seguridad cibernética en todos los mercados, todo ello mientras cumplimos con las regulaciones locales y los requisitos de conformidad”. En el año 2022, a nivel global, la compañía invirtió más de 3.200 millones de dólares en tecnología y desarrollo.

Capas tecnológicas

Para que todas estas áreas estratégicas fluyan de la mejor manera posible, la tecnología de PayPal se organiza en cuatro capas principales. En la capa más baja se encuentra, según Shivananda, la infraestructura, “conformada por las bases de datos y los lagos de datos, que son los sistemas fundamentales de la empresa”. Estas aplicaciones se encuentran en millones de miles de servidores y “gran parte de nuestra infraestructura ha sido construida por PayPal; sin embargo, también alojamos parte de nuestra tecnología en la nube pública. Esta combinación nos permite conectar a nuestros clientes por todo el mundo y ofrecer la velocidad, el valor y la fiabilidad que se espera de PayPal”. En esta capa también se alojan los datos del usuario: perfil, comportamiento, transacciones y riesgo. Es, en definitiva, “el esqueleto estructural de PayPal”.

La segunda capa está compuesta por un conjunto de tecnologías que se encuentran sosteniendo todos los productos y servicios de PayPal. “La llamamos plataformas fundacionales y nos permite utilizar de manera eficiente la infraestructura subyacente”, explica el director de tecnología de la compañía. Estas plataformas se componen de una serie de funcionalidades, como las herramientas internas para desarrolladores e ingenieros, o servicios como almacenamiento en caché, mensajería, administración de contraseñas, criptografía, etc. “Es vital para nuestro negocio. Es como el sistema nervioso de PayPal”.

“Gran parte de nuestra infraestructura ha sido construida por PayPal; sin embargo, también alojamos parte de nuestra tecnología en la nube pública"

En la siguiente capa, denominada Plataformas Comunes, es donde se encuentra la tecnología que compone los productos y servicios; es “el ingrediente secreto”. Está conformada, entre otras plataformas, por la de identidad (autentificación de usuarios), pagos (transacciones), riesgo (confianza y seguridad), cumplimiento (cumplimiento de obligaciones de todas las jurisdicciones), privacidad (protección de información contextual), impuestos, finanzas (movimiento de dinero) y tesorería (administración de dinero). Es, según Shivananda, “el cerebro de PayPal”. 

La cuarta y última, denominada capa de experiencia del comerciante, consumidor y desarrollador, “incluye nuestra interfaz web, nuestras aplicaciones móviles y nuestras API (interfaz de programación de aplicaciones), que permiten a los clientes utilizar nuestro servicio de forma interactiva y programática. Es el corazón de PayPal, lo más cercano a nuestros clientes”.

Dependiendo de la criticidad de cada proyecto, Paypal utiliza un modelo de trabajo diferente. En el caso de áreas que son fundamentales para la compañía, la tecnología se desarrolla internamente o se utiliza de código abierto; en el caso de productos básicos, se adquiere software comercial ya preparado; y en el caso del contexto, que sería aquello que queda entre lo que es fundamental y lo que son productos básicos, trabajan con socios tecnológicos. “Tomamos estas decisiones según la arquitectura, la capacidad, la singularidad, el coste, la capacidad de integración y las prioridades”.

Tecnologías disruptivas que miran al futuro

Aunque la marca cuenta con diversas tecnologías punteras entre manos, una de las más relevantes para el futuro desarrollo del negocio es la Inteligencia Artificial. “Llevamos trabajando con esto durante más de una década, incluyendo el aprendizaje profundo basado en transformadores (la tecnología clave subyacente a ChatGPT). En la actualidad aplicamos la IA y la ML en todo nuestro negocio, incluso para la reducción del fraude, gestión de riesgos, protección del cliente, servicios personalizados y empoderamiento del comercio global”.

Como empresa con más de 431 millones de cuentas activas y 35 millones de comerciantes funcionando en su red bilateral, la compañía ve un enorme potencial en la IA en la creación de la próxima generación de pago y comercio. Los datos que sirvan para desbloquear el valor en ambos extremos son, según Shivananda, claves. “En la actualidad, PayPal tiene más de 200 petabytes de datos de pagos; datos que son una ventaja competitiva ya que contienen información valiosa y potencial para impulsar mejores experiencias comerciales para consumidores y comerciantes”. Un ejemplo del tremendo impacto de la IA lo encontramos en el hecho de que de 2019 a 2022, en un momento en que los volúmenes de pagos de la compañía casi se duplicaron de 712 mil millones de dólares a 1,36 billones de dólares, redujeron la tasa de pérdidas a casi la mitad, en parte gracias a los avances en algoritmos y tecnología de IA. “Hoy, gracias a nuestros avances en IA, podemos adaptarnos rápidamente por ejemplo a cambiar los patrones de fraude para proteger a nuestros clientes. Los modelos de aprendizaje profundo de PayPal se pueden entrenar y poner en producción en dos semanas, e incluso en menos si se trata de algoritmos más simples. Esto nos permite entrenar modelos utilizando los últimos datos de producción, incorporar nuevos patrones de fraude, así como retroalimentarnos de agentes internos y clientes de PayPal”.

La marca trabaja también en dar forma a la próxima generación de monedas digitales y a su correspondiente infraestructura financiera. Para ello, ha invertido en su propia tecnología y personal, presentado patentes relacionadas con criptomonedas, y en empresas centradas en blockchain. “Dada nuestra experiencia como empresa de pagos digitales de confianza y nuestras sólidas relaciones con el ecosistema regulatorio y financiero, creemos que la combinación de nuestro equipo de blockchain, criptomonedas y monedas digitales (BCDC), y nuestras inversiones en infraestructura técnica y regulatoria proporcionarán una sólida plataforma para nuestras aspiraciones en este espacio”. 

En definitiva, la meta es impulsar la inclusión, la ubicuidad y la utilidad de los activos digitales para definir aún más el futuro del comercio y el intercambio de valores.