Jeff Maggioncalda (Coursera): “Desde el punto de vista competitivo, la IA nos está ayudando enormemente"

En 2012, los profesores de ciencias de la computación Andrew Ng y Daphne Koller, de la prestigiosa universidad estadounidense de Stanford, crearon Coursera con un objetivo: democratizar el acceso al aprendizaje de alto nivel. En sus 11 años de vida, el proyecto se ha convertido en una de las mayores plataformas de e-learning del mundo, cuenta con 136 millones de alumnos registrados y colabora con más de 300 universidades de primera línea y otros socios de la industria. Cursos, especializaciones, certificados profesionales, proyectos guiados, licenciaturas y másteres forman parte de la extensa oferta formativa de este gigante, que está experimentando una nueva disrupción gracias a la adopción de la tecnología de moda: la inteligencia artificial generativa, como cuenta a CIO España Jeff Maggioncalda, actual consejero delegado de la compañía. 

El estadounidense, que lidera la empresa desde 2017, recaló el pasado 8 de noviembre en Madrid, donde la compañía trabaja con varias universidades, escuelas de negocio como el IE Business School y compañías como el banco BBVA, y se sentó con esta publicación para explicar cómo está abrazando Coursera la inteligencia artificial, en especial su sabor ‘generativo’ y por qué esta tecnología va a suponer un revulsivo no sólo para la compañía sino también para la industria de la educación a distancia y virtual. “Ayudará a nuestros alumnos a acceder a un aprendizaje interactivo y más personalizado y a nuestros socios educadores a crear contenidos de forma más rápida y dirigida a un público determinado, desarrollar, en definitiva, cursos realmente a medida”, reconoce. 

Parece que la inteligencia artificial está revolucionando su negocio y, en particular, su capacidad de traducir cursos a otros idiomas, ampliando el alcance de los mismos. Cuéntenos cómo. 

Aunque en los últimos años las traducciones ya habían mejorado mucho con la aparición de herramientas como Google Translator, que ha sido muy útil durante unos años, la llegada de ChatGPT ha mejorado drásticamente esta tarea. Nosotros, en concreto, hemos podido traducir 4.000 cursos a 17 lenguas diferentes, el español entre ellas. Y traducimos todo, no sólo los subtítulos de los cursos, como hacíamos antes, sino también toda la navegación de la página, las notas, las declaraciones... todo. 

"[Gracias a la IA generativa] hemos podido traducir 4.000 cursos a 17 lenguas diferentes, el español entre ellas"

Usando ChatGPT... 

Bueno, no es exactamente ChatGPT, sino el servicio de traducción que utilizamos, que a su vez se basa en tecnología GPT (‘Generative Pre-trained Transformer', en inglés), una tecnología de procesamiento de lenguaje natural que no sólo ha mejorado la propia inteligencia artificial sino las traducciones en particular, haciendo este proceso más rápido y económico. 

Fue Google quien presentó este modelo de ‘Transformers’ por primera vez en el informe Attention Is All You Need, publicado en 2017 y que describe un nuevo modelo de IA capaz de encontrar las relaciones entre las palabras, mejorando significativamente los procesos de traducción. De hecho, este informe fue la base de ChatGPT, que durante mucho tiempo estuvo trabajando en esta tecnología GPT con el mecanismo de atención para construir los primeros grandes modelos de lenguaje (LLM). En 2019, Microsoft invirtió mil millones en OpenAI para construir un sistema capaz de entrenar los albores de ChatGPT utilizando ese nuevo mecanismo de atención creado por Google. Así nació la IA generativa ChatGPT, que desde entonces ha evolucionado. Ahora, de hecho, todas las grandes empresas tecnológicas (la propia Microsoft, Google, Tesla, Meta, X, Amazon, etc.) están construyendo sus propios sistemas de IA generativa... Aunque OpenAI fue la primera en lanzarlo. 

Hay empresas de traducción que también leyeron ese informe en 2017 y decidieron aplicar esta tecnología. Porque ChatGPT puede traducir, pero no tan bien como una compañía de traducción. Y, bueno, esa es la relación entre ChatGPT y la mejora experimentada en el campo de la traducción. 

¿Y qué tecnología en concreto usan en Coursera y cuánto han invertido en ella? 

Microsoft firmó el año pasado un gran acuerdo con OpenAI y desde hace unos meses los modelos de IA generativa de esta empresa están en la plataforma de nube Azure de la primera, de modo que compañías como la nuestra puedan usar esta tecnología  adaptada al mundo de los negocios y de forma segura y privada. 

En Coursera, por tanto, utilizamos las funcionalidades de IA generativa de OpenAI en Azure; no obstante, también trabajamos con Google. En definitiva, utilizamos diferentes modelos de IA generativa. 

¿Cómo empezó este viaje? ¿Cuándo empezaron a usar la IA generativa? 

De forma individual, como una experimentación, en 2021. Pero cuando llegó al mercado ChatGPT hace un año vimos un mundo nuevo. Personalmente, fue todo un shock porque es una herramienta muy poderosa. En diciembre del año pasado, incorporamos la IA generativa a nuestra estrategia y dijimos a nuestros ingenieros que pararan los proyectos en los que estaban inmersos en ese momento para centrarse en esta materia.

En enero de este año creamos un equipo llamado Génesis para trabajar en esta tecnología y analizar cómo va a cambiar nuestro negocio. En este equipo hemos involucrado no sólo a los ingenieros y jefes de producto, sino a empleados del área de marketing, a diseñadores, a gente de estrategia...  

En este grupo hemos estado haciendo sesiones de brainstorming desde el punto de vista estratégico para analizar cómo esta tecnología puede cambiar nuestra dinámica competitiva, crear nuevas oportunidades de mercado, generar más valor para los clientes, aumentar la eficacia de la empresa... También hemos estado estudiando qué amenazas pueden surgir con el uso de esta tecnología. Básicamente, hemos realizado un análisis DAFO: puntos fuertes, puntos débiles, oportunidades y amenazas.  

Aparte, hemos analizado la parte puramente tecnológica y un grupo de ingenieros empezó a construir prototipos para ver cómo funcionaba, observar las conexiones con Azure, etc. Y nos hemos centrado en cómo esta tecnología puede ayudar a los estudiantes y socios de Coursera. Uno de los aspectos donde vimos mejoras claras es en la traducción. Ahora podremos traducir todos nuestros cursos a casi todos los idiomas. Otro aspecto que estamos mejorando es la funcionalidad de ‘coach’ que tiene nuestra plataforma, un chatbot que ayuda a los alumnos a estudiar y que podrá, también, orientarles en el desarrollo de su carrera profesional, ayudarles a descubrir más cursos en función de sus intereses y objetivos e incluso realizar evaluaciones personalizadas. 

A nuestros socios, como el IE Business School, esta tecnología puede ayudarles a elaborar cursos más rápido. Tenemos un producto llamado Course Builder que permite a un profesor indicar, en lenguaje natural, qué quiere enseñar, con qué objetivos de aprendizaje y para qué público objetivo para crear un curso de forma muy sencilla. También con la IA generativa los profesores podrán generar cuestionarios y evaluaciones de forma muy ágil. 

¿Podemos decir, por tanto, que la IA generativa es un punto de inflexión para Coursera? 

Sin duda. Ayudará a nuestros alumnos a acceder a un aprendizaje interactivo y más personalizado y a nuestros socios educadores a crear contenidos de forma más rápida y dirigida a un público determinado, desarrollar, en definitiva, cursos realmente a medida.  

¿Cuánto invierte la compañía en TI? ¿Puede desvelarlo?   

No puedo desglosar cifras concretas, pero, básicamente, es lo que invertimos en I+D. El año pasado destinamos el 20% de nuestros ingresos (que este año llegarán a los 600 millones de dólares) a esta partida. Yo calculo, más o menos, que hemos invertido unos 500 millones de dólares en I+D en los últimos 10 años. 

Lleva seis años al frente de Coursera, unos años, por cierto, muy intensos desde todos los puntos de vista: económico, geoestratégico... Incluso hemos sufrido una pandemia. ¿Cómo ha vivido la evolución de la compañía en este periodo?  

Coursera nació en 2012 y yo me incorporé en 2017. En este periodo la compañía ha crecido muy rápido. Al principio todo era gratis y no dábamos servicio a empresas, éste empezó en 2016.  

Después de mi llegada, una de las primeras iniciativas que lanzamos fue Coursera para Campus, para ampliar los servicios a más universidades y estudiantes. Pero, después, en 2020, llegó la pandemia y esta situación lo cambió todo. Coursera pasó de tener 47 millones de estudiantes a 77 millones en un año. Nuestros ingresos ese año crecieron un 59%. De hecho, por ese incremento del negocio decidimos salir a bolsa en 2021.   

En este periodo nos hemos convertido en una empresa global con empleados repartidos por todo el mundo. De hecho, cuando tuvimos que cerrar las oficinas, debido a la pandemia, decidimos que íbamos a permitir a los empleados trabajar desde cualquier parte del mundo y esa es nuestra política ahora. 

Y, bueno, después de la pandemia, apareció la tecnología ChatGPT, con todos los avances que conlleva; es más, ya tiene voz y suena como un humano. La IA generativa nos obliga a todos, empresas e individuos, a estar al día. 

Tras la pandemia y con la vuelta a la presencialidad en las universidades y en muchas empresas, ¿han notado menos interés por el aprendizaje a distancia? 

La experiencia de estar juntos físicamente no es igual a la de estarlo de forma virtual. De esto ya se ha percatado todo el mundo, tanto las personas en general como las empresas, las escuelas y las universidades en particular. Pero también sabemos ya que el modelo remoto aporta más flexibilidad, permite ahorrar tiempo en desplazamientos, etc. Por eso, lo ideal es el modelo híbrido. 

¿Prevén, por cierto, contratar empleados en España? 

Nos encantaría. Sí teníamos un empleado en este país, pero ahora trabaja desde nuestra oficina de Londres. España es importante para Coursera. Trabajamos con las universidades de este país para que muchos estudiantes extranjeros, por ejemplo, de América Latina, puedan acceder a sus cursos. Estamos ayudando a que las universidades de España tengan alcance internacional. 

Coursera fue creada por dos profesores de informática, ¿qué peso tiene la formación tecnológica en la plataforma? 

Mucho. Tenemos muchos cursos de tecnología, unos 2.300, sobre todo aplicada al negocio y a la ciencia de datos. El resto de cursos que ofrecemos giran, sobre todo, en torno a la salud, las ciencias sociales y las humanidades.  

Ahora estamos observando mucho interés por parte de las empresas de formar a sus empleados en IA generativa, así que hemos lanzado el curso ‘Generative AI for Everyone’, que imparte Andrew Ng [el presidente y uno de los cofundadores de Coursera].  

Además, tenemos previsto lanzar una academia en IA generativa (Generative AI Academy) el próximo mes de enero; brindará formación a los empleados en general y a los directivos y sus equipos. Yo mismo estoy creando el curso ‘Navigating Generative AI, a CEO Playbook’ dirigido a los directores generales de las compañías.   

"Tenemos muchos cursos de tecnología, unos 2.300, sobre todo aplicada al negocio y a la ciencia de datos"

Coursera es un gigante, pero no es la única empresa de aprendizaje online. ¿Cómo ve a sus rivales? 

Las organizaciones buscan empresas de e-learning como la nuestra, con un catálogo muy amplio y global, que ahora se está potenciando con la capacidad de traducción que nos brinda la IA. Desde el punto de vista competitivo, la IA nos está ayudando enormemente. 

Con todos estos cambios de los que hemos estado hablando durante la entrevista, ¿cómo ve el futuro del e-learning en general y del negocio de Coursera en particular en un futuro próximo? 

Los avances del aprendizaje online cada vez serán más rápidos. Cada vez mejorará más la capacidad de aprender casi de cualquier cosa por parte de cualquier persona debido a las facilidades que aporta la traducción, al acceso a la formación online desde cualquier lugar y de forma asequible, a la capacidad de personalización y de interactividad que brindan las nuevas herramientas... Gracias al e-learning cada vez será más fácil acceder a la educación. Una educación que se va a globalizar, como también lo hará el talento. El e-learning va a generar más igualdad de oportunidades en el acceso a la formación y, por tanto, a mejores empleos.