La revolución de las 'smart cities' de España, un buen momento para posicionarnos como referente global

Las Smart Cities se erigen como un ambicioso sueño que pronto podría convertirse en una fascinante realidad para todos nosotros. Imagina un futuro donde las ciudades no solo serán lugares donde vivimos, sino ecosistemas inteligentes, conectados y altamente eficientes que se adaptan a nuestras necesidades y hacen nuestras vidas más fáciles y sostenibles.

A pesar de ser un concepto del que se lleva hablando durante más de una década, las smart cities han sido objeto de un desarrollo desigual en España, con escaso pábulo sobre sus beneficios y potenciales. La falta de información y la priorización de otros proyectos han limitado su expansión a nivel nacional.

Sin embargo, el reciente estudio de cobertura de smart cities en un municipio de la Comunidad de Madrid, realizado por Tower Consultores, ha brindado una valiosa visión sobre la haabilidad y eficiencia de la tecnología aplicada en la ciudad inteligente. Se detectó una tasa de pérdida de mensajes inferior a 2,58% en sensores de clase C, mientras que en los sensores de clase A no hubo pérdida de mensajes gracias a la robustez del protocolo de comunicación, incluso con niveles de señal recibida en el servidor cercanos a los límites típicos (-115 y -120 dBm). Los resultados destacan la importancia de considerar factores que afectan a la habilidad en la transmisión de datos como son la calidad de la señal, los factores de corrección digital y la latencia de los mensajes.

Uno de los aspectos fundamentales que se identificaron fue la necesidad de ajustar la altura de las antenas de recepción de las gateways. Esta modificación permitirá abordar problemas como el ruido excesivo en superficie o el bloqueo de señal debido al tráfico rodado, sin afectar la disposición de los sensores, cuya ubicación está determinada por los elementos que monitorizan.

La habilidad de esta red ha puesto de manifiesto que una apuesta decidida por la innovación puede transformar una ciudad en un entorno inteligente y sostenible, capaz de gestionar sus recursos y consumos de forma más eficiente y racional, por lo que no hay excusas para desaprovechar la madurez tecnológica y posicionar a España como un referente global en el campo de las smart cities.

Para lograrlo, es crucial una colaboración firme y sólida entre grandes empresas y pymes españolas del sector, así como el compromiso claro y decidido de las administraciones públicas. Solo a través de esta implicación conjunta podremos escalar y extender los casos de uso de Smart Cities en todo el país.

Es hora de tomar conciencia de los beneficios tangibles que las smart cities pueden ofrecer en términos de eficiencia, sostenibilidad y mejora de la calidad de vida. Con una visión multidisciplinar y la participación de todos los actores, España tiene el potencial para liderar esta revolución tecnológica y convertirse en un ejemplo a seguir a nivel mundial. ¡El futuro de nuestras ciudades está en nuestras manos!