La IA como herramienta clave en la transición ecológica
La inteligencia artificial puede contribuir a la eficiencia energética, facilitar la modelización de riesgos y procesar enormes cantidades de datos y compararlos.
Hay informes de consultoras como PwC que creen que la IA nos ayudará en nuestra transición ecológica, en particular al permitir desvincular crecimiento y emisiones de gases de efecto invernadero. Las proyecciones de PwC prevén que la IA reducirá las emisiones mundiales en un 4% de aquí a 2030, con un crecimiento global del 4.4%. Sin embargo, es importante señalar que este estudio de PwC no ha sido validado por investigaciones independientes sujetas a revisión por pares, un estándar oro en la ciencia. La investigación académica es más cautelosa, y es difícil evaluar el impacto positivo que puede generar la IA.
Aun así, la IA puede contribuir en tres campos para acelerar la transición ecológica. En primer lugar, tiene una gran capacidad de previsión. La IA puede contribuir a la eficiencia energética. Un ejemplo es la ciudad suiza de Zúrich. Al integrar la IA en la gestión de su alumbrado público, ha conseguido reducir su consumo de energía en un 70%, encendiendo las luces sólo cuando son necesarias, gracias a las previsiones de tráfico.
La IA también puede utilizarse para modelizar riesgos. Es lo que está haciendo Inria con el proyecto Arcos, por ejemplo, para entender cómo pasa un huracán de categoría 1 a 5. Así podemos anticiparnos mejor a estos cambios, salvando vidas y evitando daños materiales.
Por último, la IA permite procesar enormes cantidades de datos y compararlos. En Puerto Rico, Rainforest Connection la utiliza para explotar datos acústicos en el bosque con el fin de combatir la caza furtiva y la deforestación. The Guardian e investigadores de Oxford utilizan la IA para analizar imágenes por satélite de bosques y comprobar si los créditos de carbono pagados por las empresas se correspondían con una ganancia real de absorción de CO2 sobre el terreno. Como resultado, en el 90% de los casos, las afirmaciones eran falsas o inverificables.
Otros ejemplos del uso de la IA en el entorno son la optimización en agricultura y energías renovables. La IA puede hacer más viables las tecnologías verdes. Por no hablar del aumento de la productividad de los investigadores en todos los campos.
El autor de este artículo es Dejan Glavas, profesor de Finanzas y responsable del Instituto AI for Sustainability de ESSCA School of Management.
