Planificación, esponsorización y colaboración: tres mandamientos para alinear datos y negocio

Los datos se han convertido en parte inherente de las organizaciones del siglo XXI. La profunda transformación digital acaecida en los últimos tiempos ha elevado su protagonismo hasta máximos históricos; los datos no solo se han convertido la columna vertebral de distinguidas áreas corporativas, sino también en el motor propulsor de la toma de decisiones, la agilidad empresarial y la entrega de valor adicional.

Precisamente tomando este escenario como punto de partida, Javier Yuste, CDO de Zúrich,  Valle Gutsein, Data Analytics and Models manager en Santander Consumer Finance, y David González, group head of Big Data Analytics e AI en Vodafone, han debatido sobre las mejores prácticas y estrategias para lograr que los datos se conviertan en un bien, en un activo y no en un dolor de cabeza para las organizaciones. Bajo la batuta de Javier Martínez, ejecutivo de cuentas en Alteryx, y en el marco del Chief Data Day impulsado por iKN, la planificación, la esponsorización y la colaboración se han perfilado como los tres mandamientos para alinear datos y negocio.

A continuación, las principales conclusiones.

No empezar la casa por el tejado

Si hay algo en lo que han coincidido los tres portavoces sobre las tablas ha sido en la necesidad de priorizar la planificación. “No se debe subestimar esta cuestión”, aseguraba Gutsein, “los CDO y responsables de datos deben analizar la línea de salida y, en consecuencia, trazar un plan serio, responsable y tangible”. En su compañía, confesaba la ejecutiva, los datos son modulares, forman parte del ADN corporativo, por lo que al hablar de estrategia lo hace con conocimiento de causa. En Santander Consumer Finance optaron por el diálogo, “nos sentamos con todo el mundo, entramos hasta el fondo, entendimos los procesos de las distintas divisiones y cuán importante era el dato para ellas”. Y aunque aquello requirió “mucho tiempo”, les permitió definir un roadmap con una visión 360.

Para González también resulta crucial “pararse a escuchar, dedicar tiempo a entender las prioridades de las distintas unidades de la empresa, los datos, las arquitecturas, los equipos”… Se debe analizar desde la “viabilidad” y la “entrega de valor”, “si se dedica tiempo a la estrategia de pensamiento, a definir un plan, el posicionamiento se mantiene a lo largo de los años”. De hecho, brinda un “gran retorno a largo plazo”. Muestra de ello es que desde que el ejecutivo asumiera su posición seis años atrás, los cimientos de su táctica han permanecido inalterables.

Conjugar data y negocio

Entre las líneas maestras del plan de acción ocupa un lugar fundamental la conjugación de datos y negocio. Sobre ello ha hablado Yuste, quien tras año y medio como CDO de Zúrich, cuenta con bagaje de sobra a la hora de entrelazar la función del área de Data con las propias necesidades del negocio. A fin de cuentas, aseguraba, “se trata de introducir piezas clave que mejoren la eficiencia, agilicen procesos y simplifiquen tareas”. Por ello han apostado por virar su actividad hacia un enfoque muy de red centrado en el cliente utilizando la analítica avanzada para determinar dónde concentrar los esfuerzos comerciales. En este proceso, el mayor problema no han sido los propios datos, ni construir modelos predictivos, ha estado relacionado con engranar la maquinaria para que ese desarrollo funcione de forma “eficaz”. Una de las barreras que se han encontrado en este sentido ha sido la gestión del cambio; sin embargo, avanzan hacia la ansiada transformación. “Hemos conseguido no estar solo bajo el paraguas de TI, sino acercarnos al negocio”, ha confirmado.

Esponsorización: el respaldo de una mano ‘amiga’

Es en el citado acercamiento al negocio donde los CDO evidencian la necesidad de hacer partícipe a la alta dirección. En palabras de Yuste, el cometido no es otro que sumar adeptos, demostrar que los equipos de datos son transversales, que trabajan en horizontal, que no están ahí para desarrollar tareas puntuales. Esto es especialmente importante porque “sin un espónsor es muy complicado llevar a término cualquier iniciativa”. Conocedores de ello, en Santander han logrado que el equipo de Data dependa directamente del CEO. “Para acometer la estrategia definida necesitamos un patrocinador que es el propio director ejecutivo, solo así podemos financiar las iniciativas, contratar, desarrollar”. 

Para aquellas compañías en cuya cultura corporativa no está la creencia en el poder transformador de los datos, lograr el respaldo necesario “es complicado, pero no imposible”. En ese caso, aconseja Yuste, el responsable de datos deberá buscar un par de casos de éxito con impacto en el negocio para demostrar a la alta dirección que hay un camino. Tras conseguirlo, dice optimista, el trabajo no habrá hecho más que comenzar: “Analiza el contexto, alinea tu estrategia con la organización y averigua cómo entregar valor”.

Pasar de la teoría a la práctica es una de las tareas que González lleva a cabo en su día a día sin perder el foco en la monetización del dato. A modo de ejemplo, instruía a los presentes, “hemos puesto en marcha un proyecto para el sector turístico que ha ayudado a entender cuántas personas visitan un lugar, dónde pernoctan, cuánto tiempo se quedan”. Información valiosa para aquellas compañías que encuentren aquí su nicho de mercado y quieran ajustar su oferta a las necesidades reales de los clientes.

Llamado a la colaboración

Parafraseando el verso más conocido del himno del Liverpool, aquello de you will never walk alone (nunca caminarás solo), el portavoz de Vodafone hacía un llamado a la colaboración, algo fundamental también para sus compañeros de panel. “No tiene sentido trabajar de manera aislada, solos, sin que los implicados en las tareas corporativas formen parte del camino”. Siguiendo la misma estela, Gutsein catalogaba la cooperación como algo “fundamental”. “En relación a los datos, el trabajo en equipo es vital, si no logramos que todas las áreas implicadas lo hagan suyo, fracasará”.  Con estos cuatro puntos de anclaje estratégicos, “los CDO podrán pivotar sus acciones” presentes y futuras.