La computación cuántica llega a la aviación
IBM y Delta colaborarán para explorar las potencialidades de la tecnología en la transformación de la experiencia del viaje.
La aplicación de la computación cuántica en aviación, en lo que se refiere a la relación con el cliente y el trabajo de la plantilla, es el eje clave bajo el que se articula la alianza de IBM y Delta. Una colaboración que está prevista que se extienda durante varios años y bajo la que la aerolínea se unirá a la red IBM Q Network, convirtiéndose en la primera empresa de su sector en formar parte de esta comunidad.
La red de IBM Q engloba a más de un centenar de las compañías de Fortune 500, que están colaborando en la investigación de las posibilidades del procesamiento cuántico. Delta también trabajará con el IBM Q Hub de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, mediante el que podrá acceder a los ordenadores cuánticos de la red, con los que se exploran casos de uso comercial e investigación fundamental. Entre estos equipos está el de 53 qubits, distinguido como el de mayor cantidad de estos elementos que está disponible para acceso externo.
En concreto, el acuerdo entre las compañías prevé explorar cómo utilizar la tecnología para transformar la experiencia de clientes y miembros de los distintos departamentos de la firma. Según explicaba el CEO de Delta, Ed Bastian, en la apertura del CES 2020 que se está celebrando en Las Vegas, la aerolínea está empleando tecnología para llegar a endpoints no tradicionales y ofrecer experiencias innovadoras, con el objetivo de reducir el estrés durante la jornada de viaje.
Se espera que la computación cuántica tenga un importante papel en áreas como la previsión meteorológica, la investigación aeroespacial o en medicina. Pese a que todavía está lejos de alcanzar todo su potencial, se están multiplicando las iniciativas que exploran sus posibilidades de aplicación y que la integran en distintas industrias.
En los últimos meses, se ha probado en varias tareas, como la gestión de contratos y pagos, agilizar la realización de pruebas médicas para comprobar la efectividad de los tratamientos en pacientes con cáncer o para analizar los riesgos de activos financieros.
