Los bancos comprometidos de lleno con la digitalización son apenas un 12% a nivel global

La inversión en nuevas herramientas en el sector bancario no ha dado el resultado deseado. Así lo apunta un informe de Accenture, en el que establece que, pese a que los principales bancos comerciales han invertido un billón de dólares en los últimos tres años en transformación digital, junto con las empresas tradicionales de 'retail', no se ha conseguido que esto se traduzca en un incremento significativo de los ingresos. Esto es: se detectan beneficios, pero no acordes a las expectativas.

Para la investigación se analizaron diversos parámetros en relación al grado de digitalización de 160 entidades, como el reflejo en las comunicaciones oficiales de este proceso, la visión de analistas y la valoración de Accenture. En base a estos criterios, se establecieron tres categorías de madurez tecnológica: los que integran un enfoque digital, los que son activos digitalmente y el resto. En la primera, en la que se engloban aquellas firmas totalmente comprometidas con el proceso, únicamente se encuadran uno de cada ocho bancos, el 12% del total. Son aquellos que están buscando convertirse en firmas 'digital-first' y tienen una relación en la que los ingresos multiplican en 1,2 a los costes. 

Accenture detecta que los que mejor resultado están teniendo lo consiguen no tanto gracias al incremento de ingresos por sí mismo, sino en base a una mayor eficiencia en los gastos. Esto es: el crecimiento interanual de ingresos es más lento en el periodo analizado (2011 a 2017), pero han conseguido limitar de forma más exitosa el crecimiento de los costes, con una diferencia de cerca de dos puntos porcentuales entre la tasa de crecimiento anual compuesta de ingresos, del 3,5%, y la de gastos, que se sitúa en el 1,6%. Esta relación es de 1,3 puntos en los activos digitales (de 4,2% de ingresos a 2,9% de gastos) y prácticamente inexistente en el resto, con un ritmo de crecimiento anual en la facturación del 5,8% pero con los costes al 5,7%. 

Las entidades con la categoría de activo digital suponen el 38% del total. Se encuadran aquí las que están inmersas en procesos de transformación pero fallan al intentar comunicar al mercado una estrategia coherente y convincente. Aunque el retorno es limitado, Accenture espera que sus expectativas se mejoren. A las firmas financieras restantes, que suponen la mitad del total, la consultora recomienda que alineen sus planes en digitalización y se comprometan con ellos, ya que de momento no se perciben progresos visibles y están suscitando la desconfianza de los inversores.