El 'blockchain' se convierte en aliado de la propiedad industrial e intelectual
Las compañías Minsait y Clarke Modet y Cº lanzan la primera aplicación para estas funcionalidades, que promete reducir los costes, mejorar la seguridad y agilizar los tiempos de trabajo.
Avances en la aplicación de 'blockchain' en nuevos casos de uso. Las firmas Minsait y Clarke Modet y Cº han presentado la primera herramienta de cadena de bloques para propiedad intelectual e industrial. Este nuevo sistema facilita el registro seguro, inmutable y confidencial de cualquier conocimiento y saber del cliente.
El servicio habilita una aplicación a través de la cual accederán los clientes a la red híbrida permisionada de Minsait, que está sustentada mediante tecnología 'blockchain' de tercera generación. La integridad del sistema se audita a través de la red Alastria, en la que Clarke, Modet & Cº tiene desplegado un nodo. Esto se completa con el empleo de un servicio de que proporciona capacidades de prueba de existencia de activos digitales.
El proyecto es el primer caso de su tipo 100% productivo y ya cuenta con clientes reales, aunque la red está todavía en fase de pruebas, por lo que hasta que se lance por completo se apoya en Ethereum. Según explican las compañías, el empleo de esta solución de 'blockchain' garantiza la reducción de los costes actuales de los métodos tradicionales de registro de evidencias hasta ahora disponibles en el sector de la propiedad intelectual e industrial hasta en 30 veces. También se mejora la seguridad, al evitar el acceso de terceros a documentos confidenciales para levantar evidencias. Además, se agiliza todo el proceso, ya que se puede levantar evidencias de manera inmediata y masiva en formatos en los que no se podía con los métodos tradicionales.
Este sistema innovador permitirá la gestión adecuada de figuras de vanguardia como es el secreto empresarial, pero es también aplicable a otros sistemas de protección, y se puede emplear en cualquier otro escenario de negocio.
En los últimos tiempos, el 'blockchain' está experimentando una fase de exploración de sus posibilidades, con pruebas en su uso más allá del sector financiero, como para trazabilidad, publicidad fraudulenta o en telecomunicaciones. Sin embargo, hay cierta prevención sobre su potencial, ya que su despliegue absoluto se está ralentizando por las dudas sobre las condiciones reales de su aplicación, sobre si supondrá una mejora respecto a las alternativas existentes o si tendrá alcance comercial.
